Vencer el cáncer de mama requiere detección precoz y concienciación sobre la enfermedad.
El cáncer de mama sigue siendo una de las principales preocupaciones de salud en Paraguay. Especialistas insisten en la importancia de la detección precoz y el acceso a mamografías gratuitas para mujeres mayores de 40 años.
La doctora Marina Ortega, líder en la lucha contra esta enfermedad, destacó que el cáncer de mama representa una de las primeras causas de cáncer en el país, con alrededor de 600 nuevos casos registrados anualmente en el Instituto Nacional del Cáncer. Durante una reciente campaña de concienciación, Ortega instó a las mujeres a aprovechar la oportunidad de realizarse mamografías sin necesidad de una orden médica, una medida fundamental que busca facilitar el acceso a este tipo de controles.
“Es crucial que la ciudadanía acuda a los controles médicos no solo en octubre, que es el mes de la concienciación sobre el cáncer de mama, sino durante todo el año”, enfatizó la especialista. De acuerdo con sus indicaciones, la mayor incidencia de casos se presenta a partir de los 50 años, aunque también se debe considerar la historia familiar al evaluar el riesgo.
Además, Ortega enumeró varios síntomas que las mujeres deben tener en cuenta y que podrían indicar la presencia de problemas en las mamas. Entre ellos se encuentran enrojecimiento en la zona afectada, la aparición de bultos, el crecimiento anormal de venas, retracción de la piel, aumento de tamaño en una de las mamas, y la presencia de tumoraciones. “Cualquier anomalía debe ser evaluada por un especialista, ya que la detección precoz aumenta significativamente las posibilidades de un tratamiento exitoso, que puede alcanzar hasta un 90% de curación”, explicó.
Con un enfoque dirigido a mantener una buena calidad de vida, la profesional recomendó adoptar hábitos saludables que puedan ayudar en la prevención del cáncer. Entre estos, destaca la importancia de una buena alimentación, realizar actividad física regular, evitar el consumo excesivo de alcohol y no fumar. Ortega también recordó que, a pesar de las dificultades que puedan surgir para atender la salud —como el trabajo, la familia o las limitaciones económicas—, existe una ley que otorga dos días libres al año a las mujeres para realizarse estudios como el papanicolaou y la mamografía.
Para facilitar la realización de estas mamografías, la doctora Ortega mencionó varios centros de salud donde las mujeres pueden acudir para obtener este servicio de manera gratuita. Entre los lugares referidos se encuentran Ciudad Mujer, el Hospital Nacional, el Hospital San Pablo, el Hospital de Luque, Mariano Roque Alonso y el Hospital Josefa Barbero.
La importancia de la sensibilización y la educación en salud no puede subestimarse en la lucha contra el cáncer de mama. Las campañas no solo deben enfocarse en la detección, sino también en la prevención y la promoción de estilos de vida saludables. En este sentido, es fundamental que la población tome conciencia sobre la relevancia del chequeo regular y la autoexploración mamaria.
Las autoridades sanitarias, junto con expertos en oncología, continúan trabajando en la promoción de la prevención del cáncer de mama mediante la creación de políticas públicas que garanticen el acceso universal a la salud y la educación sobre esta enfermedad. La meta es reducir la incidencia y mejorar los índices de supervivencia, haciendo de la detección precoz un pilar fundamental en esta lucha.
Con el avance de estas iniciativas, se espera que más mujeres en Paraguay se sientan motivadas a realizarse estudios de manera regular y familiarizarse con su cuerpo para identificar cualquier cambio. La unión de esfuerzos entre el sector salud, las organizaciones comunitarias y la sociedad civil es clave para inspirar a las mujeres a cuidar de su salud y apoyar campañas de concienciación.
En un país donde el cáncer de mama se ha vuelto un problema significativo, la colaboración y la información oportuna son herramientas esenciales para combatir la enfermedad. Las palabras de la Dra. Marina Ortega resuenan como un llamado a la acción: «Mujeres, hacéte la mamografía». Así, la lucha contra el cáncer de mama se torna una responsabilidad compartida, donde cada mujer puede ser protagonista en el cuidado de su salud.