Rolón asigna nuevos fiscales adjuntos a sus respectivas áreas en la justicia.

El Ministerio Público de Paraguay ha llevado a cabo una significativa renovación de su estructura, con la asignación de nuevos fiscales adjuntos que asumirán a partir del 14 de octubre. Este cambio, anunciado por el fiscal general Emiliano Rolón, busca mejorar la eficiencia y el alcance de la justicia en el país.

La reciente resolución del Fiscal General, identificada como N° 4057, marca el inicio de una nueva etapa para la Fiscalía. En una ceremonia que tuvo lugar en Asunción, los diez fiscales adjuntos prestaron juramento ante diversas autoridades, comprometidos a desempeñar sus funciones en distintas áreas del territorio nacional. Este movimiento no solo es reflejo de la voluntad de reforzar la lucha contra el crimen, sino también de optimizar la asignación de recursos humanos dentro de la institución.

Los fiscales adjuntos que asumieron su cargo son: María Estefanía González Arévalos, María Luján Estigarribia Marín, Natalia Beatriz Fúster Careaga, Fabiola Guadalupe Molas Alcaráz, Manuel Nicolás Doldán Breuer, María José Abed Oviedo, María Asunción Alicia Sapriza Gómez, Diego Sebastián Zilbervarg Giménez, Diego Augusto Arzamendia Ovando y Alma Belinda Zayas Acevedo. Cada uno de ellos estará encargado de diferentes regiones y funciones, con el objetivo de fomentar un sistema judicial más cercano y accesible a la ciudadanía.

Dentro de la misma resolución, se destacó la reasignación de algunos fiscales ya en funciones. Por ejemplo, Augusto Salas Coronel asumirá responsabilidades dentro del Área I, que abarca las Unidades Penales Ordinarias de la Sede I de Asunción, así como las Unidades Especializadas de Lucha contra el Abigeato en la capital y en los departamentos Central y Presidente Hayes. Esta estrategia parece enfocarse en la necesidad de atender temas de gran relevancia para la comunidad.

Entre los nuevos fiscales será Natalia Beatriz Fúster Careaga, quien estará a cargo del Área IV, correspondiente al departamento de Guairá. Otro nombramiento relevante es el de Fabiola Guadalupe Molas Alcaráz, quien vela por el Área V en el departamento de Itapúa. Estos nombramientos reflejan la intención de Rolón de darle un enfoque regional a los problemas judiciales, con profesionales que conocen las dinámicas locales y que están dispuestos a abordarlas de manera directa.

El compromiso del Ministerio Público se extiende a otros departamentos, como Caaguazú, donde Diego Sebastián Zilbervarg Giménez ejercerá funciones en el Área VI. Asimismo, el Área VIII, que corresponde al departamento de Presidente Hayes, tendrá como responsable a Alba Rocío Cantero Vera, mientras que el Área IX, en Concepción, estará a cargo de Alma Belinda Zayas Acevedo. Las designaciones estratégicas como estas pretenden mejorar la respuesta de la Fiscalía ante situaciones delictivas en diversas regiones del país.

Otro punto importante tratado en la reciente reestructuración es la permanencia de Manuel Nicolás Doldán Breuer, quien fue designado para continuar al frente de la Unidad Especializada de Asuntos Internacionales, Extradiciones y Asistencia Jurídica Externa del Ministerio Público, a partir del 21 de octubre. Este cargo es crucial, especialmente en un país que enfrenta desafíos transnacionales en el ámbito del crimen organizado y el narcotráfico.

La resolución del fiscal general no solo indica un cambio en nombres, sino también un intento por intercambiar experiencias y establecer protocolos de trabajo que fortalezcan la institucionalidad del Ministerio Público en Paraguay. Con estos movimientos, se espera que la ciudadanía perciba una mejora en la atención y respuesta de las instituciones ante los problemas de seguridad y justicia que la afectan.

En un esquema de justicia más ágil y eficiente, el nuevo equipo de fiscales adjuntos se presenta como una oportunidad para impulsar cambios significativos en el sistema caro a la población, quien reclama una justicia más efectiva. La implementación de estas nuevas designaciones promete una atención más puntual a los problemas locales, así como un fortalecimiento de la lucha contra la impunidad y el delito en todas sus formas.