Roa Bastos y su obra llegan a la «Caja» del Instituto Cervantes.
Un homenaje a Augusto Roa Bastos se llevó a cabo hoy en Madrid, donde objetos personales del laureado escritor paraguayo fueron guardados en una caja de seguridad del Instituto Cervantes.
La ceremonia estuvo presidida por el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, quien destacó la trascendencia de Roa Bastos en el ámbito de la literatura en español. Al evento asistieron también la hija del escritor, Mirta Roa, directora de la Fundación Roa Bastos; el embajador paraguayo en España, Justo Apodaca; el periodista Adrián Cattivelli, y Ana Martini, presidenta de la misma fundación, quienes rinden homenaje a la figura del autor.
Dentro de los objetos que fueron depositados se encuentra una primera edición de «Yo, el Supremo», novela que le valió el Premio Cervantes en 1989, así como un poema, una fotografía y copias personales de novelas de otros autores, entre ellas «Los exiliados» de Gabriel Casaccia, «Los jefes» de Mario Vargas Llosa y «Las buenas conciencias» de Carlos Fuentes. Estos elementos son testimonio de la rica trayectoria de Roa Bastos y su impacto en la literatura hispanoamericana.
García Montero no solo elogió la obra del autor paraguayo, sino que también enfatizó su compromiso con la libertad y los derechos humanos, recordando el contexto de exilio que vivió ante la persecución del régimen dictatorial de Alfredo Stroessner. «Hoy, con este acto, rendimos homenaje a un autor esencial que nos deja un legado de resistencia y creatividad», expresó el director del Instituto Cervantes.
La Caja de las Letras, donde se custodian estos objetos, ha sido un lugar de referencia para legados de escritores destacados a nivel internacional, incluidos premios Nobel y personalidades del cine y la música. Este espacio se ha convertido en un símbolo del respeto y la memoria cultural, resguardando la herencia de quienes han dejado una huella indeleble en el arte y la literatura.
Mirta Roa expresó su emoción durante el acto, señalando que «este acto casi mágico nos devolvió una parte de mi padre». La presencia y el reconocimiento del legado de Augusto Roa Bastos en el Instituto Cervantes no solo enriquece la cultura literaria hispana, sino que también vuelve a poner de relieve la relevancia del guaraní y el bilingüismo de Paraguay en el panorama cultural.
Finalmente, el homenaje a Augusto Roa Bastos en Madrid reafirma la importancia de la literatura como vehículo para la reflexión sobre los derechos humanos y la identidad cultural. Su obra continúa vigente, inspirando a nuevas generaciones de escritores y lectores que encuentran en sus palabras un llamado a la libertad y la justicia. Este notable evento en el Instituto Cervantes se convierte, por tanto, en un punto de encuentro entre el pasado y el futuro de la literatura.