Presupuesto en educación superior: Paraguay es el país que menos invierte en este sector.
La senadora Blanca Ovelar ha hablado enérgicamente sobre el crítico estado de la educación superior en Paraguay, subrayando su importancia para el futuro del país. Durante la última sesión del Senado, Ovelar destacó que menos del 20% de los jóvenes de entre 19 y 25 años acceden a la universidad, lo que coloca a Paraguay entre los seis países de la región con menor cobertura educativa.
La preocupación de Ovelar no se limita solamente a la educación superior. También ha planteado cuestionamientos sobre el abandono escolar, un fenómeno que afecta a muchos niños en el país, en gran parte por razones económicas. «¿Qué vamos a hacer con los niños que abandonan la escuela? Abandonan por pobres. Necesitamos opciones nuevas de segunda oportunidad, necesitamos ir a buscarlos para que terminen la secundaria», enfatizó la senadora.
Ovelar responsabiliza, en parte, al Ministerio de Educación y Cultura (MEC) por no tener los recursos suficientes para abordar esta crisis. «El MEC no tiene plata para eso», aseguró, haciendo eco de la frustración que muchos en el sector educativo sienten ante la falta de inversión en programas que podrían ofrecer soluciones a esta problemática. El llamado de la senadora es claro: el país necesita un compromiso renovado para enfrentar el problema del abandono escolar.
En su intervención, Ovelar también mencionó el reciente aumento en el presupuesto del país, que asciende a 1.800 millones de dólares para el ejercicio fiscal actual. De esta cantidad, 100 millones están destinados al Ministerio de Salud y otros 100 millones a las Fuerzas de Seguridad, incluyendo el Ministerio de Defensa y el Ministerio del Interior. Sin embargo, su preocupación radica en que esta asignación no incluye financiamiento significativo para el sector educativo, lo que podría limitar las posibilidades de mejorar el acceso y la calidad de la educación.
La situación se vuelve aún más alarmante si se toma en cuenta que, según estadísticas, la falta de acceso a la educación superior afecta no solo a los jóvenes, sino también al desarrollo económico del país. Es ampliamente reconocido que una población educada y capacitada es fundamental para impulsar el crecimiento y la competitividad en un mundo globalizado. Por lo tanto, el estancamiento en los niveles de educación superior podría tener repercusiones negativas en múltiples sectores y limitar las oportunidades de desarrollo.
Además, la senadora Ovelar instó a sus colegas a reflexionar sobre sus prioridades legislativas. En un país donde la educación aún enfrenta grandes desafíos, es necesario que se dé un impulso a iniciativas que busquen mejorar la cobertura y la calidad educativa. Esto incluye una evaluación crítica de cómo se distribuyen los recursos y cómo se pueden generar programas innovadores que apoyen a aquellos jóvenes que enfrentan dificultades económicas para continuar su educación.
En este contexto, las palabras de Blanca Ovelar retumban en el Senado como un llamado a la acción. La senadora aboga por un enfoque más humanitario y pragmático hacia la educación, proponiendo que se implementen programas que ofrezcan oportunidades a quienes han desistido de su camino académico. Es fundamental crear una red de apoyo que pueda reintegrar a estos jóvenes en el sistema educativo; de lo contrario, el riesgo es que Perú continúe enfrentando altos índices de abandono escolar y una educación universitaria que sigue siendo un lujo para muchos.
El debate en torno a la educación en Paraguay es crucial no solo desde el punto de vista político, sino también para el bienestar social y económico de la nación. Si bien Ovelar ha puesto el tema sobre la mesa, la decisión de priorizar la educación está en manos de todos los actores involucrados. Con la esperanza de que este llamado resuene en la clase política, la sociedad civil también juega un rol importante en la promoción del cambio necesario para mejorar las oportunidades educativas en el país.