Licencia para que menores conduzcan vehículos: «Blanquearemos una situación que ya ocurre».
La Cámara de Diputados de Paraguay está considerando una propuesta para reducir la edad mínima de conducción a 16 años. Esta iniciativa busca regular una práctica ya común en muchas localidades del país.
El proyecto, impulsado por el diputado colorado Derlis Rodríguez, permitiría que los jóvenes de 16 años conduzcan vehículos, siempre que cuenten con la autorización de sus padres y la aprobación de un juez. Según Rodríguez, esta medida responde a una realidad existente en varias ciudades del interior, donde adolescentes ya manejan sin una regulación formal.
«Esto ya ocurre hace tiempo. Queremos que tengan un registro interurbano solo para la ciudad de donde pertenece el conductor menor. Vamos a blanquear una situación que está ocurriendo», manifestó el diputado en una reciente entrevista con ABC AM 730. Esta declaración subraya la intención de la propuesta: formalizar y regularizar prácticas que, aunque puedan ser arriesgadas, ya son parte del paisaje urbano en muchas áreas.
Rodríguez también citó ejemplos de otros países de la región que han implementado normativas similares. Países como Argentina, Venezuela, Colombia y Ecuador permiten que menores de 18 años puedan conducir, con diversas condiciones. Además, destacó que en Dakota del Sur, Estados Unidos, la edad permitida para conducir es incluso de 14 años, lo que indicaría una tendencia global hacia la flexibilización de la normativa de conducción para jóvenes.
El proyecto de ley se encuentra actualmente en fase de debate en varias comisiones de la cámara baja, lo que sugiere que la iniciativa está recibiendo atención y análisis por parte de otros legisladores. La discusión incluye aspectos como la seguridad vial, la responsabilidad de los padres y la capacidad de los jóvenes para manejar adecuadamente un vehículo en condiciones de tráfico real.
Este cambio legislativo, de ser aprobado, no solo transformaría la normativa vigente en Paraguay, sino que también podría influir en la cultura vial del país. La propuesta ha suscitado opiniones encontradas, donde algunos argumentan a favor de la autonomía y la responsabilidad de los jóvenes, mientras que otros expresan preocupaciones sobre la seguridad en las carreteras.
A medida que avanza el debate, la sociedad paraguaya observa con atención cómo se estructurará el marco legal para los jóvenes conductores. La proposta está dirigida no solo a proporcionar un marco legal, sino también a fomentar la educación vial entre los adolescentes, un aspecto que podría integrarse en la legislación futura.
En resumen, la reducción de la edad mínima para conducir en Paraguay ha abierto un discusivo en el ámbito nacional que toca varios puntos críticos, desde la seguridad vial hasta la responsabilidad familiar. La evolución de este proyecto podría marcar un hito en la legislación sobre tránsito y seguridad en el país.