“El Premio Robin Wood llegó para permanecer en Cultura”
La primera edición del Premio Robin Wood se celebró anoche en el World Trade Center, homenajeando a grandes talentos del cómic y la literatura en un evento lleno de emoción y gratitud.
Los premios principales fueron otorgados al paraguayo Nico Espinosa y al argentino Domingo “Cacho” Mandrafina. Durante la ceremonia, se destacó la trayectoria de varios escritores e historietistas nacionales, quienes recibieron diplomas y trofeos. Entre los galardonados también estuvieron Caló Sosa, Kike Olmedo, Roberto Goiriz, Carlos Arguello, Juan Moreno, Dani Zayas y Nicodemus Espinosa, además de otros como Aníbal Ferreira y Melki Melgarejo, quienes no pudieron asistir.
Ale Espinosa, uno de los presentadores, reconoció el trabajo de estos autores nacionales, brindando un momento especial para cada uno de ellos. «A veces es muy solitario tener que trabajar horas sobre la mesa de dibujo, pero estoy muy feliz de que se realicen homenajes como este», comentó Espinosa al recoger su premio. Hizo énfasis en su gratitud hacia Robin Wood, quien, según él, le brindó la confianza necesaria para desarrollarse en el mundo del cómic.
Graciela Sténico, representante de la familia Wood, también compartió su emotivo discurso durante la ceremonia. Recordó cómo cuidó de Robin en sus momentos más difíciles y agradeció al público por mantener viva su memoria. “Robin amó su trabajo y ver su legado reconocido en esta noche me conmueve profundamente”, expresó con lágrimas en los ojos. Su intervención destacó la importancia del esfuerzo colectivo para establecer el 17 de octubre como el Día de la Historieta Paraguaya.
El evento contó con un jurado compuesto por figuras reconocidas del medio, quienes evaluaron más de 30 nominaciones de autores de Paraguay y Latinoamérica. Cada uno de los premiados recibió un trofeo artístico, concebido a partir de un diseño original. Nicodemus Espinosa, por su parte, recibió el galardón del hada, una obra creada por el escultor Juan Pablo Pistilli.
Además, se otorgaron menciones honoríficas a importantes personalidades del cómic latinoamericano. Ziraldo Alves Pinto, en representación de Brasil, y Eduardo Barreto, de Uruguay, fueron reconocidos por su contribución al mundo de la historieta, destacando específicamente su colaboración con Robin Wood en numerosas obras.
La ceremonia terminó dejando un fuerte mensaje de unidad y reconocimiento a la producción artística en la región. Domingo Mandrafina, al recibir su premio, reflexionó sobre la importancia de la historia del cómic latinoamericano: “Gracias por todo esto, por esta reunión increíble. Es fundamental reconocer nuestras raíces y nuestra identidad en el mundo del cómic”, destacó.
Nicodemus Espinosa también recordó sus inicios junto a sus colegas: “Recuerdo cuando, con Roberto y Juan Moreno, soñábamos con hacer una revista de historietas. No teníamos recursos, pero pudimos hacer realidad El Raudal”, recordó con nostalgia. De esta manera, el evento concluyó con un mensaje de esperanza y crecimiento en el ámbito de la historieta, reafirmando que el público seguirá disfrutando del arte y el talento nacional por muchos años más.