Diez detenidos en CDE, incluyendo prófugos y sospechosos de posesión de droga.
En un exitoso operativo realizado este sábado, diez personas fueron detenidas en Ciudad del Este, en respuesta a denuncias vecinales sobre actividades delictivas en el barrio San Juan. Las fuerzas de seguridad involucradas incluyen el Grupo Lince y la Policía Motorizada.
Entre los arrestados, destaca Milciades Martínez Román, de 19 años, quien contaba con antecedentes por hurto agravado y tenía una orden de captura vigente desde septiembre de 2024. También fue capturado César Claridge González, de 39 años, con antecedentes por robo agravado e incumplimiento del deber alimentario, y quien tenía una orden de captura desde febrero de 2022.
Los otros detenidos son Edgar David Molinas Ortiz (22), Alexis Daniel Mercado Méndez (18), Marcos Pereyra Dos Santos (31), Eduardo Leiva Esquivel (27), Freddy Osvaldo González Bogado (41), con antecedentes por robo y hurto agravado, así como Hugo Ramón Guzmán Mendieta (41) y Francisco Ezequiel Báez Heine (25). Estos arrestos se producen en un contexto donde la lucha contra la criminalidad se vuelve cada vez más urgente.
El operativo fue llevado a cabo tras recibir múltiples quejas de los vecinos del barrio San Juan, quienes expresaban su preocupación por la inseguridad y la presencia de actividades delictivas en la zona. Cuando los agentes de la policía llegaron a realizar las detenciones, los sospechosos intentaron escapar, pero fueron rápidamente capturados gracias a la coordinación de las fuerzas de seguridad.
Es importante señalar que el Juzgado Penal de Garantías de Ciudad del Este ha sido notificado sobre las detenciones, y se está evaluando la situación jurídica de los aprehendidos. Esto refleja el compromiso del sistema de justicia para abordar la criminalidad de manera eficaz y transparente.
La comunidad de Ciudad del Este ha manifestado su preocupación por la creciente ola de delitos en la región. El operativo es un claro mensaje de que las autoridades están tomando medidas activas para combatir la criminalidad y restaurar la seguridad en los vecindarios afectados. A través de este tipo de intervenciones, se busca generar un ambiente de confianza entre los ciudadanos y las autoridades policiales.
La ejecución de este operativo se alinea con las estrategias del Ministerio del Interior, que ha enfatizado la importancia de trabajar en conjunto con las comunidades para identificar y combatir el crimen organizado y otros delitos. Este enfoque se ha convertido en una prioridad nacional, considerando las estadísticas sobre incremento en la delincuencia en diversas zonas del país.
A medida que avanza el proceso judicial contra los detenidos, se espera que las autoridades continúen con la vigilancia en la zona y en otras áreas críticas, para evitar que las actividades delictivas se reanuden. Las fuerzas de seguridad han reafirmado su compromiso de permanecer alertas y responder de manera efectiva a cualquier señal de alarma que provenga de la comunidad.
El desafío que enfrenta la ciudadanía y las autoridades es significativo, pero la reciente intervención ha dado esperanzas de que los esfuerzos mancomunados van por el camino correcto hacia la mejora de la seguridad en la región. La colaboración entre la población y las fuerzas del orden es clave para consolidar un futuro con menor incidencia delictiva y mayor paz social.